Desde luego, hay más ilustraciones increíbles, pero sólo los que paguen el menudo precio de lo que cuesta esta GEMA podrán deleitarse con el talento que despliega Nik. Si es que en efecto lo dibuja y colorea él. Y sino, qué delicada sensibilidad, cómo logra captar el alma de la obra del querido Antoine de Saint-Exupéry.
Igual, creo que tirarle mala onda no genera nada bueno. Pues cualquiera puede arrojar mala leche, pero no cualquiera suma sin restar.
¿Cuales son |